Sonia (Julieta Timossi) y su tío Iván (José Escobar) viven el Carmen de Patagones, al sur de la provincia de Buenos Aires, en un hostel heredado. Allí, además, trabajan y ensayan con el sueño de presentarse con sus canciones en la fiesta zonal.
En aquel lugar, detenido en el tiempo, el único huésped es Pablo (Ignacio Gracia), un joven médico, en crisis con su vocación, que lucha por un medio ambiente mejor. Del cual los dos están enamorados.
Hasta allí llegarán Alejandro (Jorge Fernández Román), el padre de Sonia, y su nueva mujer (Manuela Amorosa) para reclamar algo. En una convivencia, con planteos, que empiezan a incomodar.
“El amor es un bien”, de Francisco Lumerman, es una maravillosa relectura del clásico “Tío Vania”, de Anton Chejov. Una obra escrita en 1899 que retrata las miserias del ser humano, en una Rusia lejana, pero cuya adaptación la hace cercana, identificable y muestra que, más allá del contexto, hay temas que son universales y trasgeneracionales.
Pequeñas historias que cuentan tanto, que van más allá, que hablan de la vida misma, del (des)amor. Inteligente, graciosa por momentos, bien actuada. Sumamente disfrutable.
Todo está tan bien puesto que como espectadores quedamos inmersos inmediatamente en estos mundos íntimos que chocan. Padeceremos el no tiempo de este lugar perdido, nos ilusionaremos con sus sueños, nos embroncaremos con las injusticias…
Ficha técnica:
Actores: Julieta Timossi, José Escobar, Ignacio Gracia, Jorge Fernández Román y Manuela Amorosa.
Dramaturgia: Francisco Lumerman.
Dirección: Francisco Lumerman.