Maureen (Cecilia Chiarandini) es una abnegada mujer que ha dedicado veinte años de su vida al cuidado de su madre Madge (Marta Lubos) en su casa en Leenane, un pueblo irlandés en una colina en la comarca de Connmera.
Allí, donde no ha llegado la globalización, ellas conviven en una atmósfera de constante tensión. Un turbulenta relación donde la violencia, tanto verbal, como hasta a veces física, se hace tediosa y anuncia constantemente un inminente final.
Esta relación, seca y brutal, se complicará cuando a la casa regresa Pato Dooley (Pablo Mariuzzi), antiguo pretendiente de Maureen, amenazando con llevársela, algo que despertará en esa madre los más sentidos celos.
Allí también Ray (Sebastián Dartayete), hermano del recién llegado, testigo de esto, un chico rebelde que no encaja en ese pueblo fuera del tiempo.
Para Oscar Barney Finn, quien estrenó “La reina de la belleza” en 1999 con Leonor Manso y Aída Luz como protagonistas, la obra “continúa siendo descarnada, un melodrama violento y cruel donde una madre y su hija están como ancladas en el tiempo”. Supo, así, volver a rescatar su espíritu del dramaturgo anglo irlandés Martin Mc Donagh, aunque admite que no buscó repetir la puesta.
La dupla Lubos – Chiarandini encarnan un duelo admirable. Con sutilezas que solo las grandes actrices pueden ofrecer, esas que les son propias, también se nota la cuidada mano del director en personajes que son riquísimos para interpretar. En una linda puesta.
Una historia fuerte, descarnada. Un drama doloroso, angustiante. Sumamente movilizante.
Ficha técnica:
Actores: Cecilia Chiarandini, Marta Lubos, Pablo Mariuzzi y Sebastián Dartayete.
Dirección: Oscar Barney Finn.
Dramaturgia: Martin Mc Donagh.
